Podría tratarse de una película de terror, o un cuento de los abuelos, pensando que en tiempos pasados es cuando se llevaban a cabo este tipo de eventos, pero es increíble que en pleno sigo XXI se tenga que hablar de esto: los llamados “torneos de lazo en Yucatán” así a simple vista entenderíamos que un torneo se basa en algún deporte o acto cultural, no imaginamos que el torneo de lazo se basa en un escenario de crueldad, y tortura, hasta conseguir la muerte de los caballos y en ocasiones también de los toros.
Principalmente en Yucatán debido a sus viejas costumbres y tradiciones que vienen de generaciones de siglos, llevan acabo este acto de entretenimiento para los seres humanos y de un cruel sufrimiento para los animales.
La supuesta diversión de tal evento consiste en encerrar a una gran cantidad de caballos, ya sea que estén lastimados por algún accidente, o simplemente que los hayan preparado para el supuesto evento.
Una vez que están encerrados en el ruedo, los dueños de dichos animales se dedican a dar un recorrido en circulo, ya que los animales están confiados liberan a un toro que de igual manera es torturado para que salga al ruedo totalmente enojado y saque su furia en contra de los caballos inocentes. El caballo cae con todo su abdomen destrozado, desangrándose, con todas las viseras de fuera es un cuadro realmente de crueldad y horror. No lo vean como algo explicito solo es la cruel realidad que viven los caballos.
La corrida no se suspende aunque el caballo ya este agonizando y se encuentre herido ya de muerte la corrida continua; y como si esto no fuera suficiente las personas que asisten se dedican a tomar videos y fotografías que después son expuestas en redes sociales, o en paginas dedicadas a promover este tipo de eventos. Lo que más impresión da es que permiten la entrada a menores de edad que disfrutan y ríen de este espantoso evento, que clase de padres, permiten que sus hijos presencien tal acto; que clase de respeto se le puede inculcar a los niños cuando ven la forma vil y cruel de matar a seres vivos, cuando ellos ven que es algo normal el hacerlo, es increíble pero las personas que asisten ya no sufren al ver todo esto, parece que están contentos y disfrutan el ataque a un animal que solo lucha por sobrevivir.
Al finalizar la corrida, los organizadores se dedican a reunir los restos del caballo, causando emoción y risas entre los asistentes; a pesar de que en Yucatán existe una ley de protección de la fauna y una prohibición estricta para realizar los torneos de lazo nada los a podido parar, esto pasa cada fin de semana o cada que se lleva a cabo una fiesta patronal del estado. Es triste pero cada vez es más la gente que paga para entrar a ver este tipo de supuesto espectáculo, cada vez es más la difusión que se le da, y las personas por el simple hecho de ver sangre por morbo asiste y paga lo que cueste.
El problema es que si no se hace algo al respecto cualquier comunidad se dará el lujo de organizar sus torneos de lazo sin que alguna autoridad se atreva a impedirlo, ellos obtienen grandes ganancias monetarias, mientras que los caballos son los que pagan con su vida sin merecerlo, son animales indefensos que no tienen porque morir de una forma tan vil y cruel como la que le tiene destinada el hombre.
Una vez más hagamos conciencia, y comprendamos que todo animal tiene derecho a la vida digna y respetuosa, que no por el simple hecho de ganar dinero fácil se les maltrate y torture a este grado y se les de una muerte tan cruel solo por intereses ajenos a los caballos, si tan solo comprendiéramos el significado de la palabra RESPETO no estaríamos hablando de esto.