Réplica de Medios
Diario de México
23 de mayo 2016
Movimiento Ciudadano y habitantes originarios de Tlalpan, solicitan el reconocimiento y libre determinación y garantía del pago de servicios ambientales en suelos de uso y conservación en la Constitución de la Ciudad de México.
Vecinos originarios de núcleos Agrarios de Tlalpan pidieron a los diputados constituyentes que vayan a ser electos el próximo 5 de junio, que exista un compromiso de impulsar en la Constitución de la Ciudad de México el reconocimiento de pueblos originarios, así como la garantía del pago de servicios ambientales en suelos de uso de conservación ambiental, como un incentivo al cuidado de medio ambiente.
La coordinadora de la comisión operativa estatal del Partido Movimiento Ciudadano en la Ciudad de México, Esthela Damián Peralta, dijo que según datos de la Secretaría de Desarrollo Rural y Equidad para las Comunidades del Distrito Federal (SEDEREC), son 312 pueblos originarios los que existen en la capital, siendo su principal característica que en ellas se conservan sus propias instituciones sociales, culturales, políticas y su propia identidad.
Sin embargo, dijo hasta el momento en la ciudad los pueblos originarios no tiene el nivel de reconocimiento que merecen como colectividad respecto del disfrute de todos los derechos humanos y libertades fundamentales reconocidos a nivel federal e institucional.
Los vecinos de Tlalpan indicaron que también es necesario que se sienten las bases en la constitución para su respectiva regulación en una ley secundaria, tiene que ver con el incentivo del cuidado al medio al ambiente en los suelos de coderivación ecológica de la Ciudad de México.
Servicios ambientales que proporcionan el uso de suelo de conservación , recarga de manto acuífero, reserva de biodiversidad y mejoran la estabilización de suelos y retención de agua.
La delegación Tlalpan es una de las siete demarcaciones rurales con superficie aproximada de 30 mil 449 hectáreas, de las cuales mas del 84 % están catalogadas como suelo de conservación la cual se da en ternos raudales y de bienes comunales de los pueblos originarios.