Réplica de Medios
Medio: CNN MÉXICO
Autor: Dario Martínez Brooks
En los últimos 10 días los enfrentamientos entre policías y ciudadanos han dejado dos uniformados muertos y más de 100 heridos, pero más allá de las cifras, los hechos ponen en evidencia el rechazo y hasta indiferencia de sus ciudadanos hacia sus policías, afirman analistas.
Este jueves, dos policías de la Fuerza de Apoyo y Reacción murieron luego de una confrontación con habitantes de Atlautla, Estado de México, quienes presuntamente acusaban a los uniformados de haber asesinado a un campesino durante un operativo contra la tala ilegal de bosques.
El 21 de mayo pasado, habitantes de San Bartolo Ameyalco, en el Distrito Federal, también se enfrentaron contra policías ante lo que consideraron como una represión por una manifestación local, lo que dejó más de 100 policías heridos.
Los linchamientos de policías no son asunto nuevo. En 2004, dos policías federales murieron linchados por habitantes de Tláhuac, en la capital mexicana, cuando los vecinos creyeron que querían raptar a niños. Este fue un caso emblemático pues derivó en que el presidente Vicente Fox destituyera al entonces secretario de Seguridad Pública del DF, Marcelo Ebrard.
Estas situaciones, entre otros casos ocurridos en México, pusieron de manifiesto la “falta de capacitación, de protocolos” de la policía para comunicarse con la gente, más allá de la poca confianza que hay en las autoridades policiales, consideró Francisco Rivas, director del Observatorio Nacional Ciudadano.
“Si este diálogo está roto es porque evidentemente nuestras autoridades no han logrado pasar el mensaje de que quien está del lado de la seguridad está trabajando para nosotros”, explicó en entrevista.
La corrupción de los policías y la falta de controles efectivos, entre otras, son algunas de las razones por las que los mexicanos no confían en sus policías, considera Alejandro Hope, analista de seguridad del Instituto Mexicano de la Competitividad.
Desde hace no pocos años, las encuestas entre la población mexicana reflejan la desconfianza de sus ciudadanos por sus policías. En enero pasado, casi el 70% manifestó “poco” o “nada efectivo” el desempeño de policías estatales o municipales, según una encuesta del gobierno federal.
Además, casi cuatro de cada 10 mexicanos dijo que es “muy peligroso” ayudar a la policía de su ciudad a realizar su trabajo, mostró la 13 Encuesta Nacional sobre Percepción de Inseguridad Ciudadana en México, realizada por la organización civil México Unido Contra la Delincuencia (MUCD) y Consulta Mitofsky.
“Hay una ruptura en la comunicación entre la sociedad y las instituciones de seguridad. Estamos acostumbrados a pensar en el policía como el que es corrupto, es inepto, es ignorante. Y no consideramos que hay excelentes policías que dan su vida por cuestiones de seguridad”, dice Rivas.
Por unos pagan todos
María Elena Morera, presidenta de la organización civil Causa en Común señala que por algunos malos policías, ponemos a los demás en un juicio sumario. Creemos que todos los ciudadanos son buenos, y que todos los policías son malos”.
De ahí que 48.9% (contra 45.1%) de los mexicanos dijeron que estaban de acuerdo en que «para combatir a la delincuencia en el país, los ciudadanos hagan justicia por su propia mano», según la encuesta de MUCD y Mitofsky.
Pero además de los casos de represión policial o corrupción, los propios gobernantes —relacionados o no directamente con la policía— han fomentado la cultura de evasión de la ley, según Rivas.
“Cuando vemos que las mismas autoridades son quienes incumplen, quienes no respetan las mismas reglas que ellos incumplen, pues estamos mandando un mensaje de que la norma no es importante”, opina el director del Observatorio Nacional Ciudadano.
Pero además, Morera subraya que los mexicanos son incapaces de sentir “indignación” ante las escenas de violencia en contra de la policía, no sólo en casos de confrontaciones directas, sino también durante manifestaciones en la que grupos de personas agreden a las fuerzas de seguridad.
“Mientras los mexicanos no seamos capaces de indignarnos y de proteger a nuestros policías, los policías no van a protegernos a nosotros”, dijo Morera a CNNMéxico.
Para cambiar la mala percepción y acabar con la desconfianza de la sociedad hacia sus policías se requiere un trabajo de la sociedad y el gobierno mexicano.
Para Rivas, hacen falta que los mexicanos tengan una cultura de respeto a las normas y una aplicación estricta de castigos.
“Las policías de todos los países son representantes de quiénes somos como sociedad. Si tenemos policías que siguen siendo ineficaces es porque tenemos algo que como sociedad no hemos logrado hacer”, dijo el director del Observatorio Nacional Ciudadano.